La familia y las políticas públicas

Por el Lic. Santiago J. Bergadá

Por el Lic. Santiago J. Bergadá

Introducción

Partiendo de la premisa que la familia es la unidad central en una sociedad, y que en la medida que esa sociedad este formada por muchas y buenas familias, se puede lograr una comunidad mejor, promoviendo desde el estado políticas públicas adecuadas al fin buscado.
O sea, si queremos vivir en un país mejor, debemos apuntar a tener mejores familias, que formen mejores personas. Una vez que esto se difunde y arraiga en la sociedad, se puede generar un círculo virtuoso alrededor de la familia.

Ahora ¿cómo se logra eso? ¿Debe intervenir el estado? ¿de qué forma?. O ¿haciendo qué?. Trataré de repasar lo acontecido en las últimas décadas en Argentina y mi reflexión al respecto, concluyendo con una sugerencia o propuesta superadora.

Planteo Conceptual

Al tratar este tema vemos que hay diferentes enfoques, conceptos y definiciones de la familia. Repasemos algunas de ellas antes de continuar.

Según la Real Academia de la Lengua Española, la familia es "grupo de personas que viven juntas bajo la autoridad de una de ellas. Número de criados de uno, aunque no vivan dentro de su casa. Conjunto de ascendientes, descendientes, colaterales y afines de un linaje."

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), podemos definir la familia como “conjunto de personas que conviven bajo el mismo techo, organizadas en roles fijos (padre, madre, hermanos, etc.) con vínculos consanguíneos o no, con un modo de existencia económico y social comunes, con sentimientos afectivos que los unen y aglutinan”. Según la UNESCO, la familia es una de las instituciones que tienen una existencia más dilatada en el tiempo, pero también la que está sufriendo profundos cambios que la familia, como grupo fundamental de la sociedad y medio natural para el crecimiento y el bienestar de todos sus miembros, y en particular de los niños, debe recibir la protección y asistencia necesarias para poder asumir plenamente sus responsabilidades dentro de la comunidad,”

Según el papa Francisco, la Iglesia ofrece una concepción de la familia que es la del Libro del Génesis, "de la unidad en la diferencia entre hombre y mujer, y de su fecundidad"[1]. ... "la familia es escuela privilegiada de generosidad, compartir, de responsabilidad, de escuela que educa a superar una cierta mentalidad individualista que se ha abierto camino en nuestra sociedad.

En síntesis podemos decir que la familia es la comunidad natural con bases afectivas conformada por madre, padre e hijos que guardan un vínculo de sangre y legal. Es la organización social más importante a la que puede pertenecer el hombre. La autoridad, la estabilidad y la vida de relación en el seno de la familia constituyen los fundamentos de la libertad, de la seguridad, de la fraternidad en el seno de la sociedad. Por lo tanto, debido a que la familia es anterior a todo reconocimiento por la autoridad pública; se impone a ella.

Los cambios culturales de las últimas décadas han influido fuertemente en el concepto tradicional de la familia. Sin embargo, la familia es una institución natural dotada de una extraordinaria vitalidad, con gran capacidad de reacción y defensa. No todos estos cambios han sido perjudiciales. Podemos rescatar aspectos positivos, como ser: una mayor conciencia de la libertad y responsabilidad personal en el seno de la familia, una mayor comunicación entre los esposos y de los padres con sus hijos, una mayor preocupación por la dignidad y desarrollo de la mujer, una paternidad más responsable, y una interacción entre las familias para relacionarse y ayudarse entre ellas.

Por otra parte no podemos negar que estos cambios culturales también dejan su secuela negativa, como ser: un creciente número de divorcios y de uniones no matrimoniales; el recurso fácil a la esterilización, al aborto y la extensión de una mentalidad antinatalista, y la emergencia silenciosa de gran número de niños de la calle fruto de la irresponsabilidad o de la incapacidad educativa de sus padres; gran cantidad de personas abandonadas por falta de una familia estable y solidaria.

Rol del Estado

Cabe preguntarnos si debe el Estado opinar, tomar posición y definir políticas públicas concernientes a la Familia. Pareciera que si, dada la importancia y gravitación que tiene como célula y motor en la sociedad. Si la misma es cuna de virtudes, podrá irradiar las mismas al resto de la sociedad.

Antecedentes en Argentina

El Programa de Asignaciones Familiares (PAF) es uno de los programas sociales más antiguos. Se instauró en 1957[2] y perseguía un objetivo de ayudar a los trabajadores con hijos, para poder competir con los solteros. Dados los cambios ocurridos en la sociedad, este Programa ha ido cambiando y hoy es más una herramienta de ayuda social.

En el año 1996 se realizó una reforma, que se plasmó en la Ley 24.714. Fue entonces cuando se crearon 2 subsistemas en la órbita del ANSES:

a) Uno contributivo para trabajadores en relación de dependencia, beneficiarios del seguro de desempleo y de la Ley de Riesgo de Trabajo. Esto se financia con una contribución del 9% sobre las remuneraciones (1,5% va al Fondo Nacional de Empleo, y 7,5% para las Asignaciones Familiares)

b) Uno NO contributivo, para jubilados y pensionados.

En el siguiente cuadro se muestran las asignaciones familiares que se fijaron con el cambio en noviembre de 1996, expresadas en dólares para una mejor comprensión, dado el deterioro ocurrido en el peso, aunque en esa fecha un dólar equivalía a un peso por la ley de convertibilidad.

En algunos beneficios figura un rango de valores, debido a que los mismos varían según rango de ingresos y según lugar geográfico de residencia.

Es a partir de esta reforma que comienza un proceso distorsivo en el enfoque u objeto del Programa, encarándose cada vez mas a paliar necesidades económicas de los empleados de menores ingresos, discriminando a los de mayores ingresos, sin prestar mayor atención al concepto de familia.

Situación Actual- Diagnóstico

Las asignaciones familiares las administra y otorga Anses.

Además de los dos subsistemas mencionados, el contributivo para los empleados activos y el no contributivo para los pasivos, hay un tercer grupo de beneficiarios que lo forman los que perciben seguro de desempleo, y por accidentes de trabajo.

En el siguiente cuadro se sintetiza y resume la información de las asignaciones familiares pagadas en marzo 2019, según datos de Anses. He tomado dicho mes para incluir la ayuda escolar que se cobra una vez al año en marzo. Para una mejor comprensión de los montos desembolsados por Anses, los he convertido a dólares de fin de marzo 2019 ($ 44/u$s). En el cuadro hay 4 grupos de 2 columnas cada uno. Las asignaciones otorgadas a los Pasivos (jubilados y pensionados), las otorgadas a los que perciben seguro de desempleo o por accidente de trabajo, la de los Activos, y por último el consolidado Total. Para cada uno de estos grupos hay una columna sombreada en verde que muestra el total de pesos desembolsado convertido a dólares, y la cantidad de casos o número de beneficiarios. Por el lado de las filas tenemos listado cada beneficio y en el renglón debajo se muestra el monto promedio por beneficiario en dólares. El monto per cápita informado es un promedio entre el total desembolsado por Anses y la cantidad de beneficiarios.

Cabe aclarar que todas estas asignaciones solo la pueden recibir quienes trabajan en relación de dependencia y obtienen un sueldo inferior a $ 53.829 por mes, o inferior a $ 107.658 computando el ingreso del grupo familiar. (A marzo equivalía a u$s 1.223 o u$s 2.446 respectivamente). Además las mismas varían según el nivel de ingreso del beneficiario en forma inversamente proporcional (a mayor ingreso, menor beneficio), y según la zona geográfica donde reside.

El costo total de esta asignaciones asciende a unos u$s 3.000 millones por año Las asignaciones familiares varían

Analicemos cada una de las asignaciones vigentes:

Matrimonio

Vemos en el cuadro anterior, que en marzo de 2019 hubo 2.190 parejas que recibieron la asignación por matrimonio por un total equivalente a u$s 141.231, lo que arroja un promedio de 64 dólares por haber contraído matrimonio.

Ahora resulta interesante cotejar estos datos con el censo nacional, dado que se observa que estos subsidios lo recibe solo una parte de la población. ¿Quiénes son los excluidos? Por una parte los de ingresos superiores al límite establecido, por otra parte los sectores más marginales, ya sea por ignorar la existencia, o la dificultad que enfrentan para realizar el trámite, distancia, etc., y también los independientes (monotributistas) quedan excluidos.

Según el censo de 2010, había 7.868.876 “parejas” en total, de las cuales 5.027.400 eran matrimonios legales. Dada la tasa de crecimiento vegetativo inter censos, podríamos proyectar a 2019 8,7 millones de todo tipo de parejas, y 5,5 millones de matrimonios legales. Si la asignación la recibieron 2.190 parejas en marzo, podemos estimar unas 26 mil parejas por año que reciben la asignación. Si relacionamos esa cantidad de nuevas parejas por año con la totalidad de parejas existentes, se requieren unos 331 años para reponer la misma cantidad de parejas. Eso demuestra que no todos reciben la asignación y muy pocos contraen matrimonio.

Mas grave aun es la creciente tendencia a no formalizar el matrimonio. Cada censo viene mostrando una disminución relativa de los matrimonios legalmente constituidos. En el de 2010 solo el 64% de las parejas tenía esa situación. Si bien es una tendencia mundial, la tasa de nupcialidad[3] en Argentina es crítica.

Según cifras del Instituto de Política Familiar (IPF) en un estudio recientemente publicado, la tasa de nupcialidad es del 9,5 en China, 8,5 en Rusia, 6,9 en EEUU, 4,2 en UE28 y solo del 3,97 en Iberoamérica lo que se considera una tasa muy baja y critica. La de Argentina ha llegado al 2,7 (la más baja de todos los países de Iberoamerica, excepto Colombia). Esto es muy grave, y cabe preguntarse qué efecto tiene la asignación por matrimonio. Evidentemente hay otros factores o aspectos en juego, que requieren una atención para revertir esta tendencia.

Maternidad

Durante los 3 meses de licencia por maternidad, la Anses se hacer cargo de la remuneración de la empleada que hace uso de esta licencia. Cuando la empelada tiene un sueldo superior al límite establecido, debe hacer un trámite especial para que se le reconozca su ingreso completo. Acá no hay ningún beneficio por maternidad, sino que se sustituye el pagador del sueldo (podría seguir pagando el empleador, compensando con sus aportes).

Prenatal

Se solicita luego de las 12 semanas de embarazo y lo percibe hasta el nacimiento del bebe. Como fue mencionado anteriormente, hay una disparidad de valores, según ingreso y según zona de residencia. Según la Resolución de Anses Nº 140/2019 las asignaciones a partir de junio 2019 se fijaron en $ 2.250 por mes para la zona 1, si el beneficiario tiene ingresos menores a $ 34.877. Si sus ingresos están entre $ 34.877 y 51.152 por mes, le corresponde una asignación de $ 1.515 por mes. Si su ingreso está entre $ 51.152 y $ 59.057, la asignación se reduce a $ 914, y en el tramo mayor de ingresos hasta $ 107.658, la asignación es de $ 469. Estos montos aumentan para los residentes en zona 2, 3 y 4 con la misma escala de ingresos. Asi en la zona 4 (Patagonia y zonas “desfavorecidas”) la asignación mensual es de $ 4.853 para le tramos de menos ingresos, luego $ 3.993, 3.608 y $ 1.832 para el tramo de mayor ingreso. No recibiendo asignación si el grupo familiar tiene ingresos superiores a $ 107.658. Entonces ¿es esto una política para fomentar la familia y la maternidad? O es una política social de redistribución de ingresos?

Nacimiento

Según el cuadro anterior vemos que la asignación se otorgó en marzo por el nacimiento de 6.501 bebes. Eso equivale a unos 78 mil por año, y según el último censo proyectado, los nacimientos en Argentina se estiman entre 480 mil y 500 mil por año. Ello demuestra que la gran mayoría no lo cobra, y que el monto fijado por la Resolución mencionada, de $ 2.622 por nacimiento no es incentivo para tener un hijo. En esta asignación el monto es el mismo para todas las zonas geográficas y cualquier nivel de ingresos dentro del tope establecido.

Adopción

Es conocido lo complejo y tedioso que es adoptar chicos en Argentina. La cifra del cuadro anterior es elocuente. Solo 23 casos cobraron la asignación. Acá la asignación estipulada desde junio 2109 según la Resolución mencionada es de $ 15.696 por adoptar un chico. (u$s 357)

Ayuda escolar

Esta asignación se otorga en marzo de cada año, a los padres cuyos hijos cursen la escuela inicial, general básica y polimodal. En el cuadro anterior vemos que en marzo de 2019 la asignación se pagó por 3,55 millones de alumnos, mientras que el total de la población entre 5 y 18 años, es 3 veces más. También sorprende la elevada cantidad de beneficiarios dentro de los pasivos, 640 mil. (jubilados jóvenes)

Conyuge

Esta asignación la cobran solo los jubilados y pensionados, y vimos en el cuadro numérico que son más de 900 mil.

Hijo

La asignación mensual por hijo tiene los mismos montos que la de prenatal, con las mismas características. En marzo pasado la cobraron por 4,6 millones de chicos, además de 250 mil hijos discapacitados. Nuevamente llama la atención la cantidad de pasivos que cobran el beneficio: más del 15% de los chicos, tienen padres jubilados (jubilaciones a temprana edad? privilegios?), y más del 50% de los discapacitados están a cargo de jubilados o pensionados. La asignación por hijo con discapacidad es 3 veces la de un hijo normal.

Otros Programas vinculados con la familia
AUH (Asignación universal por hijo)

Esta asignación surge en octubre de 2009 por el Decreto 1602/2009, destinada a quienes no reciben asignación por hijo, o que estén desocupados, o en la economía informal. O sea no es universal, sino mas bien marginal o complementaria a la vigente. En marzo de 2019 se otorgó por 2,2 millones de chicos, según el cuadro con los datos de Anses. El monto asignado es de $ 2.652 por mes, (u$s 60) mayor al de un hijo de alguien empleado. La duda es si esto no genera un incentivo contrario al deseable, ya que un desempleado, o que trabaje en la economía informal, puede no querer pasar al empleo formal, por pérdida de ingreso. Además el que recibe este subsidio no puede tener otros ingresos. Esto traba a los beneficiarios su posible ascenso social, condenándolos al estancamiento en la pobreza. Quiero remarcar que la pobreza no es un concepto estático, sino dinámico. No hay pobres, sino gente en situación temporal de pobreza. Esta asignación tiene un tope máximo de 5 hijos, y un costo fiscal equivalente a u$s 2.400 millones por año.

Madres con 7 o más hijos

Este beneficio se instauro por la ley 23.746 (octubre de 1989). Es para madres con 7 o más hijos, sin importar su estado civil, ni la edad. Es una pensión vitalicia equivalente a la mínima para trabajadores autónomos. Acá surge una aparente contradicción con el beneficio anterior que limita el mismo a la tenencia de 5 hijos. ¿Cuál es la política del estado? Apoyar a los que tienen menos de 5 hijos, o a las mujeres que tienen 7 o más hijos?. Este Programa estuvo suspendido entre octubre de 2017 hasta febrero de 2019, en que la Justicia pidió su rehabilitación. Anses quería auditar o investigar la elevada cantidad de casos que perciben este beneficio. Por ejemplo en 2002 lo cobraban 56.450 madres, y para 2009 se había cuadriplicado esa cantidad, ya que lo cobraban 215.246 madres.
Como bien nos recuerda el Dr. Ludovico Videla[4], al mencionar el principio formulado por A. Lindbeck que sostiene que “una vez abierta una ventanilla de subsidio, en lugar de reducirse la población protegida, con el transcurso del tiempo ella aumenta geométricamente”

Reflexión, sugerencias

Por todo lo expuesto parece demostrarse que los programas de asignaciones familiares, “asignación universal por hijo” y pensión vitalicia a las madres con 7 o más hijos, no han tenido efecto positivo en mejorar, consolidar o en el desarrollo de mejores familias. Ello impone hacer un profundo replanteo de dichas políticas públicas.

Las mismas se fueron distorsionando con el tiempo, y apuntan más a paliar problemas de bajos ingresos, con un enfoque muy individualista y no una visión de familia. Habría que distinguir planes sociales o programas para paliar la pobreza temporal, de programas para consolidar y mejorar la familia.

¿Qué sentido tiene dar una asignación por contraer matrimonio?. Nadie decide formalizar una familia, contraer un compromiso serio y duradero por unos pocos pesos. Más aún, a pesar de esta política, hemos visto la dramática caída en la tasa de nupcialidad en Argentina, una de las más bajas del mundo. Hasta podríamos llegar a relacionar este fenómeno con la decadencia del país, dada la vital gravitación que tienen las familias en la conformación de una sociedad. Esa falta creciente de compromisos duraderos, formales y serios no son gratuitos, afecta y dañan al conjunto que lo circunda, a toda la comunidad.

También vale similar reflexión para la procreación. ¿Quién tiene un hijo por un subsidio o asignación mensual?. Esas decisiones tan profundas pasan por otro carril. Además en el caso argentino tiene un sesgo discriminatorio excluyendo a los de mayores ingresos y gran parte de los independientes. Adicionalmente es importante ver este tema en perspectiva, ya que según el mencionado informe del IPF se observa una importante caída en la tasa de fecundidad[5] en Iberoamérica que pasó del 4,77 al 2,04 entre 1975 y 2007, por debajo del reemplazo generacional que se considera en el 2,1. Argentina tiene una tasa del 2,28 pero la tendencia en caída es lo que debe preocupar y hacer algo al respecto. Simultáneamente se observa una caída en la maternidad de mujeres casadas entre la década de 1980 y 2010 (del 69% al 46%), y un aumento en la maternidad de mujeres en pareja, separadas y solteras.

Los 2 programas adicionales a las asignaciones familiares, tienen a mi juicio un diseño en el sentido contrario al desarrollo de una mejor sociedad. Apunta para abajo y no hacia arriba, buscando elevar el nivel de la sociedad. ¿Porqué digo esto?. La AUH, está dirigida solo al padre o a la madre (no al matrimonio o familia) más marginal de la sociedad: que este desempleado, o empleado en “negro” (aceptando el estado esa situación ilegal). La ley dice que también es para los que no reciben una asignación por hijo, pero eso es falso, dado que las personas de mayores ingresos no reciben ninguna de las 2. Entonces con esta política pública qué se logra: Que haya cada vez más hijos de gente carenciada, de parejas accidentales y no legales, y menos hijos de los que progresan y ascienden en sus aspiraciones. Además los que perciben este beneficio, no pueden tener otros ingresos, condenándolos a no salir de la pobreza, a no poder ascender y disfrutar de la movilidad social que tanto bien y mérito propicio nuestro país hasta mediados del siglo XX. En mi opinión esto requiere un re-diseño que revierta estas distorsiones a futuro.

Por último la ley que otorga una pensión vitalicia a las mujeres con 7 o más hijos, en nada fomenta la familia, ni el progreso o bienestar de la misma. Se otorga a mujeres, cualquiera sea su estado civil, dando una señal equivoca en el sentido que el matrimonio no tiene valor. Además está especialmente dirigida a las mujeres de menores recursos, dando una señal para que la sociedad crezca en ese segmento de la población, restringiéndole la posibilidad de ascenso y movilidad social, dado que al percibir este beneficio se le impide recibir cualquier otro ingreso, y poseer una propiedad. O sea ni siquiera pueden comprar un terreno porque perderían la pensión. En mi opinión habría que eliminar esta ley.

¿Entonces podemos recomendar alguna acción de política pública referida a la familia?. Si por supuesto que se puede hacer mucho bien y con menor presupuesto, como ser:

Campaña de Comunicación / Difusión:

Generando programas para la televisión que transmitan valores, modelos virtuosos de familia. En la familia se ejercen y practican valores como la solidaridad hacia el miembro que más lo necesita, la paciencia, tolerancia, caridad, esfuerzo, compromiso, respeto, limpieza, educación, etc….Como una imagen puede más que mil palabras, esta campaña podría revertir la dramática caída en la tasa de nupcialidad.

Cine

Financiar, auspiciar, promover películas que muestren vidas de familias virtuosas, agradables, entretenidas, etc. Creo que una campaña de este tipo durante muchos años puede tener un impacto positivo en la sociedad. En EEUU durante muchos años desde Hollywood surgieron varias películas de “cow-boys” que transmitían el valor al esfuerzo, coraje, trabajo, autoridad y justicia, para que se arraigue y penetre en la sociedad, (contrario a nuestro Martin Fierro que sugiere la vagancia, prebendas, etc).

Campaña en difusión

En escuelas, eventos culturales, con la misma línea y temática.

Revisar las asignaciones familiares

Que las mismas estén orientadas a la familia (matrimonio legal), sin discriminación de ingresos o situación económica.

Otros incentivos

Podría pensarse en otros incentivos como eximir de impuestos a la compra de autos con más de 5 asientos para familias numerosas (más de 3 hijos), deducción del impuesto a las ganancias más amplia o generosa por cada hijo, para los matrimonios legalmente constituidos.

Dar de baja Políticas Públicas Negativas a la Familia

A mi juicio uno de los aspectos más negativos de la política pública hacia la familia es la adhesión a la ideología de género. Su difusión es dañina a toda la sociedad, mas a los menos instruidos, y mucho peor la imposición de la misma en las escuelas a niños de temprana edad, generando un drama para la próxima generación.
En la misma línea habría que derogar la posibilidad del matrimonio homosexual. Una cosa es la tolerancia y respeto a personas diferentes y otra muy distinta es tratar como iguales a los desiguales. Este tema genera ruido y confusión en los menores y la población con menor formación.

La Política Pública debería apuntar a fortalecer y desarrollar la familia virtuosa como célula central y neurálgica de la sociedad para que disemine progreso, bienestar, talentos, etc.

Además de la importancia mencionada que tiene la familia, hay que considerar el rol de los padres hacia sus hijos, ejerciendo una paternidad responsable, que entre otras cosas implica el cuidado y educación de sus hijos hasta la mayoría de edad. De allí la obligación moral de responder adecuadamente por el o los subsidios que reciba del estado.

Para el ejercicio de este rol responsable de los padres, adquiere importancia la preparación y origen de la familia, así como el advenimiento de los hijos. No es lo mismo una familia que se prepara y formaliza un compromiso matrimonial, engendrando luego hijos que inscribe legalmente, que una pareja que le surgen hijos en forma accidental o imprevista y mantienen una relación informal o consensuada.


[1] 12 de septiembre de 2013 en la 47ª. Edición de la Semana Social de los Católicos Italianos en Turin.

[2] Los Decretos-Ley 7.913-14/57 se crean 2 fondos compensadores. Uno para empleados de comercio, luego CASFEC, y otro para trabajadores de la industria, luego CASFPI (Ley 15.223 en 1959).

[3] Número de matrimonios cada 1000 personas en un año.

[4] La Economía y la Familia en Argentina – Dr. Ludovico Videla – Abril 2003

[5] Cantidad de nacimientos por cada 1000 mujeres en edad fértil (15 a 49 años)

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